En 2017, a nivel latinoamericano se registraron más de 30.000 personas desaparecidas, según datos oficiales. Casi un tercio del total de las víctimas de trata de personas a nivel mundial son niñas y niños, de acuerdo con un informe presentado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) y las mujeres y niñas comprenden el 71% de las víctimas.
Jóvenes bolivianas y bolivianos no quedaron indiferentes ante esta problemática que afecta la realizad de nuestro país. Con el fin de visibilizar la problemática y promover soluciones innovadoras, las y los jóvenes se movilizaron trabajaron en una iniciativa de acción desde la población más vulnerable contra el delito de trata de personas.
Así se logró impulsar una Ley Municipal Contra la Trata de Personas en el Municipio de Tarija, una Agenda Política desde lxs jóvenes contra la Trata de Personas – Sucre y la conformación de una Red Nacional de Jóvenes contra la trata y tráfico de personas.
Las causas estructurales de la trata de personas se pueden dividir en tres factores: los socioeconómicos, socioculturales e institucionales. En el caso de los primeros, las sociedades latinoamericanas tienen altos niveles de desigualdad, un alto porcentaje de la población está sometida a la economía informal, producto de su situación de pobreza, exclusión social y movilidad humana. En el caso de los factores socioculturales, existe una legitimación de la explotación, los roles asignados a las mujeres y hombres, además de prácticas culturales que inciden y naturalizan las formas de manifestación de la trata de personas. En referencia a los factores institucionales, la corrupción e informalidad en las instituciones estatales y su débil institucionalidad hacen que el delito de la trata de personas no pueda ser enfrentado, la escaza interrelación entre los estados para combatir este delito, no existen bases de datos conjuntas que puedan facilitar la identificación de las víctimas y poder contar con estadísticas reales sobre el delito de la trata de personas. Muchos de los países tienen todavía una débil presencia y control que tienen muchos Estados de la región.
Congreso Latinoamericano contra la Trata y Tráfico de Personas
El hito clave y de inicio de las actividades fue el Congreso Latinoamericano contra la Trata y Tráfico de Personas a iniciativa del ObservaLATrata actividad bandera de la lucha contra la problemática mencionada a nivel regional.
Alianzas con el Estado
Alianzas con el Estado y entre las organizaciones, instituciones y colectivos juveniles. Ahí se decidió que se debería tener una agenda política desde los y las jóvenes devenida de un análisis de experiencias y trabajo en cuanto a, específicamente, trata de personas, puesto que el tráfico y los delitos conexos se los debe ver como un tema a parte.
Observa la Trata capitulo Bolivia
Dentro del proyecto “Movilizados Contra la Trata” es que a iniciativa del Capítulo Bolivia de OBservaLATrata y en acuerdo con los otros miembros a nivel regional se inició con las gestiones necesarias para la implementación del evento y poder impulsar las agendas de incidencia política desde los jóvenes, no solo a nivel municipal, sino a nivel nacional, departamental e internacional.
Encuentro Nacional de Jóvenes contra la Trata de Personas
Se llevó a cabo en el departamento de Tarija en 2016, contando con la primera red de jóvenes a nivel nacional que trabajaban con la temática.
Los resultados
Las y los jóvenes, a través de la iniciativa impulsada por el Capítulo Boliviano de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo lograron la Elaboración del balance nacional sobre la ejecución de la política pública antitrata de personas del gobierno de turno desde una mirada de sociedad civil y así poder aportar desde una mirada holística a las decisiones a ser tomadas por las autoridades y revisar a profundo lo ya realizado por el Estado.
Además, lograron construir colectivamente desde las y los jóvenes una agenda social frente a la trata de personas, insertando de forma sistemática todos los medios posibles y factibles para un actuar correcto y comprometido desde la juventud boliviana contra el delito de la trata de personas, además de hacer una correcta separación entre lo que es trata de personas, tráfico ilícito de migrantes y conocer los delitos conexos que establece la ley 263.
Finalmente, lograron la conformación de un movimiento nacional juvenil de derechos humanos frente a la trata de personas, esto con la idea de ser la red de organizaciones, instituciones y colectivos juveniles que hagan frente a la trata, así como conocer y dar a conocer el trabajo de todas y todos los participantes en su región, debiendo ampliar esta a todos los departamentos del Estado Plurinacional.